La joven cántabra que triunfó en La Voz cuenta sobre su experiencia y sus inicios en la música
Teresa de Luis, joven cantante de tan solo veintitrés años, debutó como representante cántabra en la última edición de La Voz. Arrasando con la canción francesa Dernière danse en las audiciones a ciegas, consiguió que se giraran no uno ni dos, sino tres coaches. Entre ellos Antonio Orozco, Pablo López y, a pesar de quedar bloqueado, Luis Fonsi.
Su paso por el programa de Antena 3 la llevó a trabajar de la mano de compañeros extraordinarios. Al igual que poder recibir el consejo de artistas tan valorados como son los propios coaches de programa. Sin embargo, el viaje musical de Teresa no comienza aquí.
Sus inicios
Remontándonos a cuando no era más que una niña, Teresa creció rodeada de música. Heredando la pasión por el canto de su madre y su abuela, de pequeña se embebió de todas las canciones y ejercicios de práctica que escuchaba impartir a su madre en sus clases de música.
“Mi madre daba clases en casa y los ejercicios que oían que hacían en la clase los hacía luego yo por mi cuenta, dando berridos por toda la casa”
Al cumplir los trece años Teresa decidió, como una joven cantante y compositora en potencia, presentarse al formato kids del programa. Y a pesar de no ser seleccionada, no se dio por vencida. Años más adelante, rondando la veintena, la joven santanderina tomó la decisión de presentarse de nuevo. Por segunda vez, sus intentos no dieron frutos, pero su presencia en los castings no pasó desapercibida puesto que, años más tarde, el propio programa le ofrecerá participar de nuevo. Y, finalmente, Teresa se subió al escenario de La Voz.
Formando parte del equipo de Pablo López, Teresa de Luis continuó sorprendiendo al público con más canciones francesas, como fueron Voilà de Barbara Pravi o Je ve souviens de Lara Fabian. A pesar de ser elecciones impuestas por el programa, Teresa consiguió sobreponerse a la comprensión y pronunciación de un idioma que apenas conoce y deslumbró al público con sus actuaciones llenas de emoción y sentimiento.
“El francés es un idioma que me fascina, pero no es un idioma que domine. Eran canciones que además yo no conocía, por lo que tenía que hacer un doble trabajo de pronunciar bien, entender la canción y aprenderla bien. Pero es verdad, que aun así y con todo, yo lo disfruté mucho”
Sin embargo, como en toda historia acabó por llegar el final. En cambio, para Teresa, su paso por La Voz no fue más que otro aprendizaje que supo aprovechar y disfrutar al máximo.
“Las tres palabras que usaría para describir mi experiencia son: crecimiento, aprendizaje y madurez”
Un futuro lleno de posibilidades
La joven, nacida en Santander, reside actualmente en Madrid y continúa con su carrera musical, componiendo y creciendo como artista. Y, a pesar de haberse mostrado misteriosa a la hora de revelarnos sus futuros proyectos, su entusiasmo y ganas por que estos salgan a la luz son contagiosas.
Así pues, si quieres averiguar más sobre esta joven promesa, sobre su paso por La Voz, con qué canción se quedó con las ganas de cantar y alguna anécdota sobre los entresijos del programa, a continuación puedes escuchar la entrevista en su totalidad.